Teoría Humanista
¿Qué significa la expresión Enseñanza Humanista?
Los alumnos no son seres que únicamente participen cognitivamente sino personas que poseen afectos, intereses y valores particulares y se les debe considerar como personas totales. La finalidad del humanista no es gobernar almas sino formar a los estudiantes en las tomas de decisiones a lo largo de su vida.
¿Qué cambios deberían realizarse en el sistema educacional actual para poder poner en práctica los planteamientos humanistas?
Nuestro sistema educativo adolece de muchos problemas , entre estos la falta de innovaciones educativas que permitan a los educandos tener una educación de calidad y calidez , entre las causas están; que la mayoría de docentes
De acuerdo con este postulado se puede decir que los educandos vienen con expectativas que desean que sean acogidas por sus compañeros y educadores, a la hora de realizar una tarea, el estudiante con auto concepto alto al compararse con sus compañeros tendrá una mejor percepción de sus habilidades, mientras que los estudiantes con auto concepto bajo perderán la confianza en sus habilidades o buscaran la aprobación del docente llamando la atención mediante actividades descriptivas o desesperanza. De acuerdo con las dimensiones del auto concepto académico, los docentes tenemos que tener muy en cuenta estos factores para ayudar a los educandos a una socialización escolar más cálida en el aula de clases, conocer hasta qué punto los estudiantes aceptan a sus compañeros, y observar como es su comportamiento ante los diferentes conflictos sociales y de aprendizaje, son aspectos que nos permitirán tener niños felices a la hora de aprender y relacionase con los demás.
La Teoría Humanista de la Personalidad de Carl Rogers
BIOGRAFÍA DE CARL ROGERS
Carl Ransom Rogers (8 de enero de 1902 – 4 de febrero de 1987) psicólogo. Nació en Oak Park, Illinois, Estados Unidos. Promotor del enfoque humanista en psicología junto a Abraham Maslow. Rogers se crió en un barrio de Chicago, pero luego, en 1914, decidió buscar una vida más tranquila marchándose al campo para dedicarse a la agricultura y a la crianza de animales. Motivado por la vida en el campo, en 1919 decidió empezar estudios en la Facultad de Agricultura en la Universidad de Wisconsin-Madison. Pero, su vida de un vuelco importante al cambiar sus estudios por los de Teología en un seminario.
Desde joven tuvo una actitud aventurera y arriesgada, en 1922 decidió viajar al continente asiático, especialmente a China con un grupo de estudiantes americanos con el fin de participar en una conferencia internacional organizada por la Federación Mundial de Estudiantes Cristianos. Fue una experiencia significativa para él porque tuvo el privilegio de confrontar dos culturas totalmente distintas, la occidental y la oriental, a partir de esa experiencia Rogers cuestionó muchas cosas de su vida. Al regresar a Estados Unidos, se graduó de la Universidad de Wisconsin en Historia y luego ingresó en el Seminario Teológico en Nueva York.
Pero no terminó dichos estudios ya que prefirió entrar a la Universidad Columbia para adelantar sus estudios en psicopedagogía en la donde obtuvo su doctorado en 1931. En realidad, parece que la sed de conocimiento de Rogers era insaciable, inició estudios en el Institute for Child Guidance de New York, luego pasó al Child Study Department de Rochester a donde llegó, toda esta travesía intelectual es comentada en su libro “El proceso de convertirse en persona”. En toda esta etapa su esposa Helen Elliot fue muy estimulante. Se influyó por las teorías de Otto Rank y la corriente europea del Existencialismo.
Rogers publicó en 1939 su primer libro: The Clinical Treatment of the Problem Child. Gracias a esta publicación obtuvo una cátedra de psicología clínica en la Universidad Estatal de Ohio. Años después, fundó las bases para el movimiento de la Psicología Humanista esto quedo consignado en su libro Counseling and Psychotherapy (1942), además adelantó sus estudios en terapia centrada en el cliente. Dos años después, se mudó de nuevo a su ciudad natal para la finalidad de fundar el primer counseling center, en el que efectuó su terapia y realizó investigaciones.
Fruto de ellas es su nuevo libro, Client-centered-Therapy, podemos decir que este texto muestra el pensamiento de Rogers de la manera más contundente. En este libro el autor quiso profundizar y ampliar las cuestiones tratadas en Counseling and Psychotherapy. Rogers logró el puesto como catedrático en Psicología y Psiquiatría de la Universidad de Wisconsin. En su departamento de psiquiatría Rogers experimentó con pacientes psicóticos, obteniendo óptimos resultados que publica en 1967 en su libro The Therapeutic Relationship and its Impact: A Study of Schizophrenia.
Prefirió dejar de lado la enseñanza para fundar algunos centros de estudio y de investigación como: Western Behavioural Science Institute de La Jolla, el Center for the Study of the Person y, sucesivamente, el Institute of Peace para el estudio y la resolución de los conflictos. Rogers se dedicó a la dirección de estos institutos hasta la fecha de su muerte. Este personaje asombró al mundo de la ciencia cuando implementó por vez primera las prácticas supervisadas.
Ahora bien, lo interesante de sus teorías es que no solo son aplicables para las interacciones entre el terapeuta y el cliente, sino también en todas las interrelaciones humanas. La terapia rogeriana contrasta con las perspectivas psicológicas manejadas por Freud y las sociales de Alfred Adler y de Albert Bandura. La situación es que Rogers, a diferencia de los anteriores, supone la relación entre el cliente y el terapeuta como un elemento necesario para que se desarrolle el saneamiento del consultante. Para Rogers es necesario los elementos de escucha empática, congruencia en el consejo y la aceptación incondicional, se intenta promover un ambiente libre de amenazas donde el cliente pueda expresarse libremente. Rogers desarrolló una teoría llamada la Teoría de la personalidad.
Rogers fue el padre de la no directividad, así que realizó varias afirmaciones en las que expuso que el clima psicológico de libertad favorecía el desarrollo pleno del individuo, y lo más importante generaba autenticidad. En cuanto a la enseñanza y el aprendizaje Rogers afirmó que el papel del educador era fundamental en la trasmisión del conocimiento, el profesor tiene la responsabilidad de crear el clima inicial, comunicar confianza, y motivar a esto le denominó “comprensión empática”.
El planteamiento fundamental de Rogers exponía que la educación tenía como objeto ayudar a los alumnos a convertirse en individuos capaces de tener iniciativa propia para los retos del día a día, además de ser responsables por sus acciones para alcanzar sus propios objetivos. Realmente, los postulados de este psicólogo estadounidense fueron fundamentales para el desarrollo de la psicología y la pedagogía. Por ello, fue catalogado como uno de los psicoterapeutas más influyente de la historia, por delante de Albert Ellis y Sigmund Feriad.
Sus obras fueron muy importantes y actualmente siguen siendo muy consultadas: El tratamiento clínico del niño problema (1939), Orientación Psicológica y Psicoterapia (1942/1978), Psicoterapia centrada en el cliente (1951), El proceso de convertirse en persona (1979), Una afirmación apasionada (1969), Libertad de aprender (1969), Grupos de encuentro (1970), Psicoterapia y relaciones humanas (1971), Psicoterapia centrada en el cliente (1972), El matrimonio y sus alternativas (1972), El poder de la persona (1977), Orientación psicológica y psicoterapia (1978), Persona a persona (1980), El Camino del Ser (1980) y por último La persona como centro (1981). Algunos años después Rogers falleció, el 4 de febrero de 1987.
La teoría humanista de la personalidad de Carl Rogers
Enfatiza la importancia de la tendencia hacia la autorrealización en la formación del autoconcepto. Según Rogers el potencial del individuo humano es único, y se desarrolla de forma única dependiendo de la personalidad de cada uno.
De acuerdo a Carl Rogers (1959), las personas quieren sentir, experimentar y comportarse de formas que son consistentes con la autoimagen. Cuanto más cercana esta la autoimagen y el yo ideal, más consistentes y congruentes son las personas y más valor creen que tienen.
De acuerdo a Carl Rogers (1959), las personas quieren sentir, experimentar y comportarse de formas que son consistentes con la autoimagen. Cuanto más cercana esta la autoimagen y el yo ideal, más consistentes y congruentes son las personas y más valor creen que tienen.
De acuerdo a Carl Rogers (1959), las personas quieren sentir, experimentar y comportarse de formas que son consistentes con la autoimagen. Cuanto más cercana esta la autoimagen y el yo ideal, más consistentes y congruentes son las personas y más valor creen que tienen.
Junto a Abraham Maslow, Rogers se centró en el potencial de crecimiento de individuos sanos y contribuyó enormemente a través de la Teoría de humanista la personalidad a la comprensión del self (el “sí mismo” o el “Yo”, en español).
Tanto las teorías de Rogers como las de Maslow se centran en las elecciones individuales, y ninguna de las dos sostiene que la biología es determinista. Ambos enfatizaron el libre albedrío y la auto-determinación que tiene cada individuo para convertirse en la mejor persona que puedan llegar a ser.
La psicología humanista enfatizaba el rol activo del individuo en dar forma a su mundo interno y externo. Rogers avanzó en este campo subrayando que los humanos son seres activos y creativos, que viven en el presente y responden de forma subjetiva a las percepciones, relaciones y encuentros que se estén dando actualmente.
Acuñó el término “tendencia a la actualización”, que se refiere al instinto básico que tienen las personas a llegar a su capacidad máxima. A través del asesoramiento o terapia centrada en la persona y de investigaciones científicas, Rogers formó su teoría del desarrollo de la personalidad.
La auto-actualización
“El organismo tiene una tendencia y un esfuerzo básicos para actualizarse, mantenerse y enriquecer las experiencias del propio organismo” (Rogers, 1951, p. 487).
Rogers rechazó la naturaleza determinista del psicoanálisis y el conductismo y afirmó que nos comportamos como lo hacemos debido al modo en que percibimos nuestra situación: “Ya que nadie más sabe cómo percibimos, nosotros somos los más expertos en nosotros mismos”.
Carl Rogers creía que los seres humanos tienen un motivo básico, que es la tendencia a la auto-actualización. Como una flor que crece y alcanza todo su potencial si las condiciones son correctas, pero que está limitada por las restricciones del ambiente, las personas también florecen y alcanzan su máximo potencial si las condiciones que les rodean son lo suficientemente buenas.
Sin embargo, de forma contraria a las flores, el potencial del individuo humano es único, y estamos destinados a desarrollarnos de distintos modos dependiendo de nuestra personalidad.
Rogers creía que las personas son buenas y creativas de forma inherente, y que se vuelven destructivas solo cuando un auto-concepto pobre (la imagen que tenemos de nosotros mismos) o las limitaciones exteriores invalidan el proceso de alcanzar el potencial.
Según Carl Rogers, para que una persona alcanzara la auto-actualización, debe mantenerse en un estado de congruencia. Esto significa que la auto-actualización ocurre cuando el “Yo ideal” de la persona (quién le gustaría llegar a ser) es congruente con sus comportamientos reales.
Rogers describe al individuo que se está actualizando como una persona plenamente funcional. El principal determinante de si llegaremos a convertirnos personas actualizados o no son las experiencias en la infancia.
La persona plenamente funcional
Rogers afirmaba que todas las personas podían conseguir sus objetivos y deseos en la vida. Cuando lo hacían, la auto-actualización había tenido lugar. Las personas que son capaces de auto-actualizarse, que no constituye la totalidad de humanos, son llamadas “personas plenamente funcionales”.
Esto significa que la persona tiene contacto con el aquí y ahora, sus experiencias subjetivas y sus sentimientos, y que está en continuo crecimiento y cambio.
Rogers veía a la persona plenamente funcional como un ideal que muchas personas no llegan a alcanzar. No es correcto pensar en esto como si fuera la finalización del itinerario de la vida; es un proceso de cambio.
Rogers identificó cinco características de la persona plenamente funcional:
1- Apertura a la experiencia
Estas personas aceptan tanto las emociones positivas como las negativas. Las emociones negativas no son negadas, sino examinadas (en lugar de recurrir a mecanismos de defensa del yo). Si una persona no puede abrirse a sus propios sentimientos, no se puede abrir a la actualización del yo.
2- Vivencia existencial
Esto consiste en estar en contacto con las diferentes experiencias tal y como ocurren en la vida, evitando prejuzgar y las preconcepciones. Incluye ser capaz de vivir y apreciar de forma plena el presente, no estar siempre mirando al pasado o al futuro, ya que el primero se ha ido y el último ni siquiera existe.
Esto no significa que no debamos aprender de lo que nos ocurrió en el pasado o que no debamos planificar cosas para el futuro. Simplemente, debemos reconocer que el presente es lo que tenemos.
3- Confianza en nuestro organismo
Hay que prestar atención y confiar en los sentimientos, instintos y reacciones viscerales. Debemos confiar en nosotros mismos y hacer aquello que creemos que es correcto y que surge de forma natural. Rogers se refiere con esto a la confianza que debemos tener en el propio yo, indispensable para estar en contacto con la auto-actualización.
4- Creatividad
El pensamiento creativo y la asunción de riesgos son características de la vida de las personas. Esto incluye la habilidad para ajustarse y cambiar buscando nuevas experiencias.
Una persona completamente funcional, en contacto con la propia actualización, siente el impulso natural de contribuir a la actualización de los que le rodean.
Esto se puede realizar mediante la creatividad en las artes y las ciencias, a través del amor paternal o, simplemente, llegando a hacer lo mejor posible el propio oficio.
5- Libertad experiencial
Las personas plenamente funcionales están satisfechas con sus vidas, ya que las experimentan con un verdadero sentido de libertad.
Rogers afirma que la persona que funciona plenamente reconoce el libre albedrío en sus acciones y asume las responsabilidades de las oportunidades que se le brindan.
Para Rogers, las personas plenamente funcionales están bien ajustadas, bien equilibradas y son interesantes de conocer. A menudo, estas personas consiguen grandes cosas en la sociedad.
El desarrollo de la personalidad
De forma parecida a la referencia que hacía Freud al alma, Rogers identificó el auto-concepto como el marco sobre el que la personalidad se desarrolla.
Todas las personas tienen el propósito de buscar congruencia (equilibrio) en tres áreas de sus vidas. Este equilibrio se consigue con la auto-actualización. Estas tres áreas son la autoestima, la autoimagen o imagen de ti mismo y el Yo ideal.
“Creo que la buena vida no es un estado fijo. No es, desde mi punto de vista, un estado de virtud o satisfacción, nirvana o felicidad. No es una condición en la que el individuo esté ajustado o actualizado. La buena vida es un proceso, no un estado. Es una dirección, no un destino. La dirección es aquella que ha sido seleccionada por todo el organismo, aquella en la que hay libertad psicológica para moverse en cualquier dirección” Rogers, 1961
La auto-actualización es imposible si estas tres imágenes, especialmente la autoimagen y el Yo ideal, no se solapan.
A esto se le llama una visión incongruente de uno mismo y, en este caso, el rol del terapeuta sería transformar esta visión en una más congruente, ajustando la percepción que la persona tiene de la imagen de sí mismo y su autoestima, así como construyendo un Yo ideal más realista para que pueda conseguirse más fácilmente.
El proceso de auto-actualización llevará a un solapamiento cada vez mayor entre estas áreas y contribuirá a la satisfacción de la persona con su vida.
Según los esquemas de Carl Rogers, cada una de las tres áreas tiene tareas específicas. Hasta que una persona consiga la auto-actualización, las tres áreas se mantendrán fuera del equilibrio en cuanto a cómo se relacionan con el mundo.
Rogers hizo énfasis en el hecho de que, en lo que se refiere a la auto-actualización, la personalidad de cada persona es única; hay muy pocas personalidades hechas con el mismo patrón. Rogers también trajo a la discusión terapéutica la idea de una visión holística de las personas.
Me hubiese ayudado mucho si hubieses puesto las referencias u.u estoy haciendo una investigación para una tarea pero de igual manera fue demasiado bueno tu artículo.
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